Post grado derecho 1
- 1. CURSOS DE POST GRADO EN DERECHO. UNIVERSIDAD CASTILLA- LA MANCHA ¿HAY UNA POLÍTICA ALTERNATIVA A LA AUSTERIDAD EN EUROPA? Los organizadores del Post Grado me han pedido que reflexione en torno a una de las preguntas más trascendentes para los ciudadanos europeos. ¿Hay una política alternativa a la austeridad en Europa? El enfoque de esta reflexión, en forma de pregunta, tiene una doble y en apariencia – sólo en apariencia - contradictoria respuesta. Para deshacer esta aparente contradicción comenzaré diciendo que sí existen propuestas alternativas. En el terreno del reforzamiento y regeneración democrática y también de las políticas económicas y sociales. Y son propuestas viables. Creo, en cambio, que no existe alternativa en el sentido político del término. No existe, no está maduro, un proyecto político a nivel europeo que sea capaz de aplicarse, al menos a corto plazo. Y ello en un contexto en que cada vez resulta más necesario construir pronto esta alternativa política, que es vital para la izquierda y los valores que representa, pero también para mantener el modelo social europeo y la propia Unión Europea, como algo más que un espacio económico común. Existe la necesidad imperiosa, existen los mimbres, o sea las propuestas para ello. No existe, al menos de momento, el artesano que convierta los mimbres en cesto. Falta el sujeto político, de hecho el sujeto 1
- 2. social con capacidad para trabajar los mimbres y convertirlos en proyecto político real. Cualquier alternativa política pasa inicialmente por tener bien identificado el diagnóstico de los problemas y los retos a afrontar. Y ni siquiera el diagnóstico sobre los retos y problemas es pacífico. No existe claridad, no sólo entre el conjunto de fuerzas sociales y políticas, sino ni tan siquiera en el conjunto de las fuerzas de izquierda y progresistas. ELEMENTOS DE UN DIAGNÒSTICO ALTERNATIVO Siendo la austeridad la respuesta dominante a la crisis, lo primero que cabe preguntarse y despejar es de qué crisis estamos hablando. Se habla de crisis en singular, cuando de hecho estamos asistiendo a la confluencia de crisis distintas, aunque solapadas en el tiempo y en el espacio. La idea dominante es que ésta es una crisis financiera, provocada por el sobreendeudamiento de algunos países, que ha terminado contagiándose al conjunto de sus economías y, por irradiación, a la economía del conjunto de la UE. Sin duda ha existido una crisis financiera, pero ni es la única crisis, ni es la causa profunda de esta crisis. En todo caso, la crisis financiera ha actuado como el detonante de otras crisis con causas más profundas. 2
- 3. Un detonante que, como el cigarro mal apagado, ha prendido en la hojarasca, en este caso un sistema económico y social construido sobre aumentos incesantes de desigualdad, elevados endeudamientos, sobre todo del sector privado de la economía. La crisis no es sólo financiera, ni tan siquiera sólo económica. Es una crisis más profunda de dimensiones sociales y políticas muy profundas. Que además se expresa de manera distinta en cada país de la UE. Y no sólo porque sus condiciones económicas fueran distintas, sino porque son distintas sus realidades sociales y políticas. Aunque la dimensión de estas crisis sea en parte supranacional, sus consecuencias se viven a nivel de cada sociedad, de cada país. En España, como en ningún otro país, es evidente que confluyen crisis que tienen dimensiones territoriales distintas. La crisis provocada por la (no) gobernanza de la globalización económica, la crisis del proyecto europeo y la crisis propia fruto del agotamiento no sólo de un modelo económico, sino también del proyecto político surgido de la transición. En España, la confluencia de esta crisis múltiple se está manifestando, visualizando en forma de agotamiento del Pacto Social de la Transición. Agotamiento que tiene un triple origen: • El provocado por el desgaste producido por el paso del tiempo, que no sólo sufren los materiales, también las instituciones sociales y políticas. Un desgaste que tiene una clara expresión de conflicto intergeneracional que 3
- 4. se suma, y en ocasiones se confunde, con otros conflictos de naturaleza distinta, social, de clase. • El provocado por los desequilibrios que ha generado una globalización sin gobernanza política. Que se expresa en forma de gran desequilibrio entre la fuerza y los poderes de la economía y el mercado frente a la debilidad de la sociedad y sus organizaciones sociales e instituciones políticas. • El provocado por la aceleración en este proceso de agotamiento, inducido por la crisis financiera y su expansión al conjunto de la economía. Este agotamiento profundo y acelerado del modelo económico y social imperante durante más de tres décadas genera una triple necesidad de regeneración: Regeneración democrática. Que pasa por cambios importantes en nuestras instituciones, la Constitución en primer lugar. Pero que ya no puede limitarse al ámbito del Estado español, porque la regeneración democrática pasa por la reconstrucción del “Demos” y de su capacidad para controlar el poder “Cracia” económico. Y este proceso hoy no es posible hacerlo sólo a nivel de los estados-nación de los dos últimos siglos. La reconstrucción del “Demos” frente a la “Cracia” debe plantearse también y especialmente a nivel europeo. • Regeneración económica social, de modelo productivo. Los grandes impulsos propulsores del crecimiento económico – que no 4
- 5. necesariamente desarrollo- de España (entrada en la UE y en el Euro y burbuja especulativa) no sólo están agotados, sino que hoy son un gran obstáculo para el desarrollo de un modelo económico y social sostenible. Y determinadas respuestas a la crisis dificultan aún más la emersión de esta regeneración económico-social. • Regeneración del proyecto de estructura político-territorial de España. El modelo del Estado Autonómico que tiene grandes réditos en su haber, está agotado y hoy tiene más efectos secundarios que beneficios. RETOS PARA CONSTRUIR UNA ALTERNATIVA EN LA UNIÓN EUROPEA En este escenario, el papel de una alternativa política a nivel de la UE deviene clave para toda Europa, pero especialmente para España. Esta mirada que sugiero es una mirada europea, pero como sucede con todas las miradas europeas está hecha con ojos y cerebro nacional. O sea, es una mirada hecha desde España y, si se me permite concretar más, desde Catalunya. Nuestro mayor reto hoy es el estrechamiento de los márgenes para ejercer la soberanía nacional, especialmente en el terreno económico. Una realidad que muchos de nuestros gobernantes esconden a la ciudadanía o incluso se niegan, no quieren ver. Sin duda los márgenes para las políticas locales, regionales – en terminología europea- y estatales 5
- 6. existen, pero cada vez son márgenes más estrechos, más interrelacionados, más interdependientes. Por ello uno de los grandes retos de la sociedad española es identificar que parte de la soberanía de la ciudadanía reside en cada espacio político- territorial concreto. Y sobre todo, ser consciente que gran parte de las políticas alternativas residen en sede europea. • Las de recuperación del “Demos” social frente a la “Cracia” económica. Aunque sin olvidar los importantes márgenes para mejorar la calidad democrática de la política española. • Las políticas económicas para salir de la crisis y construir un modelo económico y social alternativo y sostenible. • Y muy probablemente también, una nueva estructura de poder político-territorial para lo que se conocen como naciones sin estado. El avance en la construcción política de estas alternativas choca con dos grandes obstáculos: • La política dominante en Europa, a nivel nacional y de la UE, está marcada por una ideología hegemónica construida sobre la base de un fuerte ultra-intervencionismo de clase, disfrazado de liberalismo. • El mantenimiento del espejismo de las “salidas nacionales”, incluso desde la perspectiva de las izquierdas. Que las derechas quieran mantener el espacio de los estados nación como espacio prevalente de la política 6
- 7. tiene su lógica porque, conocedores de la debilidad de los estados, la derecha no le hace ascos a que el gobierno real de la economía esté en manos de los mercados. Pero la izquierda europea debería ser consciente que la recuperación del equilibrio entre sociedad y economía, entre política y mercados requiere un “Demos” fuerte. Y eso sólo es posible hoy en el marco europeo. Único espacio territorial en que es viable políticamente construir verdadero poder político, en una economía globalizada y en el que la sociedad, organizada políticamente, puede mirar a la cara de tú a tú a los mercados. Esto es lo que me lleva a pensar que para que avancen las alternativas económicas y sociales al modelo imperante, resulta imprescindible plantearse un doble objetivo, de manera interrelacionada: • Reforzar y democratizar el proyecto de la UE. • Provocar un giro de 180 grados en la orientación de las políticas de austeridad y de la ideología que las sustenta. El problema de Europa no es sólo que el modelo de construcción de la UE esté inacabado, como se están acostumbrando a decir sus dirigentes. El problema de la UE es que se está construyendo con profundos desequilibrios y las políticas dominantes de respuesta a la crisis los están acentuando. De la misma manera que en el terreno económico y social, la crisis está siendo aprovechada para imponer un retroceso en el Estado Social de Derecho. 7
- 8. En el terreno democrático, las respuestas a la crisis están comportando un retroceso en la calidad democrática de la Unión Europea. Uno de los efectos colaterales de esta crisis es el deterioro del papel democrático del Parlamento Europeo, única institución con legitimidad democrática propia, que ha pasado a ser un “observador de lujo” de las políticas que nacen de los espacios intergubernamentales o simplemente tecnocráticos que “gobiernan” el proceso. El problema para la democracia no es que se ceda soberanía de las instituciones nacionales a las instituciones democráticas europeas. Esto no sería un problema, sino que es parte de la solución. El drama es que se están arrancando competencias de las instituciones democráticas nacionales para entregarlas a instancias europeas ademocráticas. El modelo de gobierno tecnocrático, post-democrático de las sociedades se está imponiendo en la UE con una inflación de espacios de decisión que se construyen a partir de acuerdos intergubernamentales. En algunos casos de naturaleza no sólo no democrática, sino ni tan sólo política, sino contractual. Es el caso de los mecanismos puestos en marcha para el rescate de los países –es un decir-, la Facilidad Europea de Estabilidad (EFSF en Inglés) que es una institución privada formada por los estados que voluntariamente quisieron participar. O el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) que es el resultado de un acuerdo intergubernamental de algunos de los países de la UE. En ambos casos las competencias para su control por parte del Parlamento Europeo son nulas. Y en el 8
- 9. mejor de los casos, el Parlamento será informado si así lo quieren los países que forman parte del gobierno de estos instrumentos. La UE debe abordar urgentemente la restitución de los equilibrios, que permitan compensar las consecuencias de un triple desequilibrio. • Desequilibrio en el interno de la construcción económica, entre lo monetario y lo económico y fiscal. Es lo que embrionaria y lentamente se intenta con el Sistema Único de Supervisión Bancaria. Pero que no aborda una verdadera construcción fiscal europea y la limita a la austeridad presupuestaria. • Desequilibrios más importantes entre la construcción económica y la no construcción política- democrática que está en retroceso. Más bien parece estar en fase de deconstrucción, no precisamente creativa. • Desequilibrio también entre los avances y profundización en políticas macroeconómicas y el bloqueo o rechazo a avanzar en políticas micro-sociales. Clave en el caso de las (no) políticas de empleo. Este es un proceso tan necesario como complejo, que topa con importantes obstáculos objetivos. A una economía y mercados que se mueven a ritmo digital se pretende contraponer respuestas políticas que actúan a ritmo pre-industrial, más bien agrícola, con ciclos de 5 años (Este es el plazo fijado por el Consejo Europeo para la Unión Bancaria). 9
- 10. Y a los espacios territoriales globales de la economía, se pretende contraponer los espacios políticos nacionales y en el mejor de los casos europeos. Esta complejidad se agranda porque algunos de los desequilibrios entre economía y sociedad, entre mercados y políticas tienen dimensión global, incluso supra-europea. De todos, el más significativo es el de las políticas fiscales. La historia de Gerard Depardieu es algo más que una anécdota. Es la evidencia de un gran desajuste provocado por una economía global, que no tiene enfrente una gobernanza también global. Y que cada vez tiene más dificultades para hacerle frente, incluso para establecer fronteras nítidas entre economía sana, oscura, negra o criminal. Los circuitos utilizados para evasión, fraude, elusión fiscal son los mismos, con independencia del origen del capital. Y a ello se pretende contraponer política local. Por eso conviene no perder de vista que a medio plazo una parte de las políticas alternativas sólo se pueden construir en el ámbito europeo y a largo plazo a nivel necesariamente global. Es el caso de la necesidad de acabar con las jurisdicciones no colaboradoras, eufemismo con el que se llama a los paraísos fiscales, de avanzar en la armonización del tratamiento fiscal del capital, de los marcos regulatorios e incluso del Derecho Penal. Aunque no debemos pecar de ingenuidad y recordar que si en el ámbito europeo el sujeto social y político es muy débil, en el ámbito global el sujeto social o político no existe. Pero estas dificultades objetivas no 10
- 11. deberían hacernos perder de vista este horizonte a largo plazo que debe comenzar a construirse ya. El debate de las alternativas económicas y sociales no es de propuestas técnicas, que también. Es sobre todo el reto y la necesidad de dar la batalla ideológica y de construcción del sujeto social o político que las ponga en marcha. 3 EJES Y UNA IDEOLOGÍA PARA LAS POLÍTICAS ALTERNATIVAS EN LA UNIÓN EUROPEA De manera muy embrionaria, creo que se dibujan algunas evidencias en el proceso de construcción de alternativas políticas. La carreta que debe soportar las políticas alternativas requiere de tres ejes sobre los que rodar: Recuperar el equilibrio entre: • Sociedad y economía. Y eso pasa por dos movimientos: o Construir instituciones democráticas. o Construir instrumentos de redistribución económica y social europeos (Ideas como un salario mínimo europeo, o una renda garantizada ante situaciones de pobreza o exclusión). Recuperar el equilibrio entre austeridad y crecimiento. Eso pasa por reformas en profundidad de: • Banco Central Europeo. Dotándole de competencias y obligaciones para que juegue 11
- 12. un papel activo en las políticas de incentivo del crecimiento. Recuperar el equilibrio entre construcción macroeconómica y deconstrucción micro-social. EL FACTOR DETERMINANTE ES IDEOLÓGICO Y ES GLOBAL Para recuperar estos equilibrios, el factor determinante es ideológico. No es posible hacerlo si no se da una importante batalla ideológica para construir ideas alternativas que fuercen un cambio de época en los valores dominantes. Y para ello hay que derrotar las ideologías imperantes desde los años 70 del siglo XX. Algunas sugerencias –en forma de “numerus apertus”- en el terreno de la batalla de las ideas. • El valor de la cooperación frente al de la competitividad. Reequilibrio. Imprescindible como cambio cultural y que tiene importantes repercusiones en el terreno del modelo productivo (subcontratación, outsorcing). • El valor de lo “común” personalizado frente a lo individual corporativizado. Clave para generar complicidades colectivas y combatir el individualismo insolidario. • El valor de los derechos frente a las mercancías. Restituir la esencia de cada cosa y diferenciar nítidamente los derechos, especialmente los fundamentales de las simples mercancías. Clave para el debate del Estado del Bienestar. 12
- 13. • El valor de lo público frente a lo privado. En este terreno es determinante romper con tabús y acabar con la doble moral del sistema: Sistema financiero. Es demasiado grande para caer, demasiado importante para aplicarle las reglas del mercado y ha provocado efectos perversos de privatización de beneficios y socialización de pérdidas. Sistemas de Seguridad Social e impacto en la distribución de poderes políticos que comporta la gestión pública o privada de la Seguridad Social. • El valor de las “relaciones” que se establece entre iguales al de los mercados. Clave para restituir el papel del Derecho del Trabajo, de la negociación colectiva en la regulación y determinación de las condiciones de trabajo. • El valor de la distribución equitativa de la renta como factor de desarrollo. Verdadera y profunda causa de la crisis y de la recesión crónica. • El valor de la cohesión social como elemento de calidad institucional de las sociedades. ALGUNAS IDEAS A NIVEL ECONÓMICO A CORTO PLAZO. Aunque creo haber dejado claro cuáles son las claves para que puedan emerger políticas alternativas a la 13
- 14. austeridad en la Unión Europea, me permito apuntar algunas medidas a corto plazo que, sin constituir una “alternativa” en el sentido amplio del término, bien pudieran suponer una discontinuidad en las políticas de austeridad y sus consecuencias en forma de cronificación de la recesión, destrucción de empleo, aumento de las desigualdades y crecimiento de la pobreza extrema. Estos apuntes no tienen la pretensión de dibujar un proyecto alternativo integral, sino sugerir algunos de los ejes de esta alternativa. IMPUGNACIÓN DE LA LEGITIMIDAD DE LA DEUDA Y DE SU TRATAMIENTO La respuesta dominante al sobreendeudamiento privado está siendo unas políticas que convierten la deuda privada en pública. Por la vía del rescate a las entidades financieras con recursos públicos, por la vía del contagio entre deuda privada y deuda soberana. Y también por los efectos que en la caída de los ingresos fiscales está provocando la crisis económica. La ciudadanía se está viendo obligada a pagar doblemente las consecuencias del sobrendeudamiento privado. En forma de deuda pública que se proyecta en forma de limitaciones a la soberanía política de los Estados y como losa frente a las generaciones futuras. Y también en forma de reducción de salarios, pensiones y derechos como consecuencia de las condiciones impuestas en los memorándums de entendimiento de los gobiernos con la Troika, como contrapartida a los fondos europeos para el rescate del sistema financiero, que además deben ser avalados por los estados. 14
- 15. La respuesta alternativa a esta “socialización” obligada de la deuda privada pasa por dos líneas de actuación, a corto y a medio plazo. A corto, por una impugnación de la legitimidad de la deuda que conlleve una rediscusión de su volumen y una reestructuración de sus importes y de las quitas y espera necesarias en su pago. No parece de recibo que para garantizar el cobro íntegro de los acreedores –agentes financieros internacionales - que ofrecieron créditos ilimitados al sector financiero con escasas garantías se ofrezca un proceso de conversión de deuda privada a deuda pública. El proceso de reestructuración de la deuda se hará, antes o después, dada la imposibilidad de su digestión normalizada por la economía española. Sería pues deseable que no se esperara a que la economía española haya sido asfixiada económicamente, como ya ha sucedido con otros países, cuya economía privada y agentes financieros se endeudaron para soportar el proceso especulativo de la burbuja inmobiliaria. • Garantía europea a la deuda privada. De cara al futuro se hace imprescindible generar los mecanismos para que las deudas de las entidades financieras tengan mecanismos de garantía a nivel europeo. No tiene ninguna lógica que, actuando las entidades financieras a nivel global y generando beneficios a nivel también global, las garantías y los mecanismos para hacer frente a las crisis financieras sea locales y, lo que es peor, recaigan en los presupuestos públicos de los países en que está domiciliada la entidad financiera que entra en crisis, en muchos 15
- 16. casos por riesgos asumidos con inversores globales y con recursos obtenidos en mercados financieros globales. En este sentido, la creación del sistema de garantía bancario europeo deviene imprescindible, aunque su entrada en funcionamiento ya no pueda ser útil para abordar la crisis actual. Razón añadida para que se acepte el debate sobre la legitimidad de la deuda y sobre el proceso de reestructuración de la deuda privada. • Eurobonos. La emisión de deuda pública debe tener garantías en el sistema monetario europeo. Única manera de hacer frente a la especulación de los mercados. La alternativa de aislar la especulación a nivel de cada país se ha demostrado ineficiente e injusta para sus ciudadanos. Con los niveles de intervención “europea” en las políticas presupuestarias y en los sistemas financieros, nada justifica no dar este paso. Salvo el espejismo de pensar que la carcoma de la deuda pública de un país no contagia al resto. EQUILIBRIO ENTRE AUSTERIDAD Y CRECIMIENTO. A pesar de constar en el título, el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) no ha generado ninguna iniciativa significativa en relación a las políticas de crecimiento. El PEC que está en el origen de las medidas adoptadas hasta el momento, Fiscal Compact, Six Pack, Two Pack, pero su desarrollo es de nuevo muy desequilibrado en favor de las políticas de austeridad 16
- 17. y en detrimento de las de crecimiento. Más bien al contrario, las políticas de rigor y rigidez en los déficits están siendo utilizadas para preparar el terreno a procesos de privatización importantes que afectan a esferas sociales hoy públicas. Una línea posibilista de medidas alternativas pasaría por utilizar las posibilidades del Banco Central Europeo y los Presupuestos de la UE. • Un Banco Central Europeo que deje de tener sus funciones limitadas al control de la inflación y apueste por intervenir como agente económico de la reactivación. • Unos presupuestos de la UE con capacidad para intervenir como agente económico y de reorientar las políticas, evitando la prioridad de la garantía de rentas de determinados colectivos. UN NUEVO MODELO DE EQUILIBRIO FISCAL Hasta ahora el modelo de equilibrio fiscal adoptado es perverso. Se basa en tres líneas de actuación que comportan inexorablemente austeridad pública suicida e injusta. • Rigor y rigidez en los déficits y la deuda pública. • Competencia fiscal entre estados. • Negativa a la armonización fiscal. El resultado es que el equilibrio fiscal que se consigue por esta vía es el de la reducción salvaje y suicida del gasto público. Que actúa preparando el terreno a la 17
- 18. privatización de importantes esferas sociales hoy públicas. La alternativa pasa por las reformas de los Tratados, dando competencias sobre fiscalidad a la UE y abordando un proceso de armonización fiscal. Especialmente en la zona Euro. ADDENDA: Para cualquier posibilidad de que las alternativas a la austeridad en Europa avancen es imprescindible disponer de dos puntos de apoyo: • Ideología propia. Aún hoy una parte de la izquierda no ha roto con la hegemonía ideológica del Reagan-Tacherismo. • Sujeto social y político con fuerza para imponerlas (No parece poder construirse con los mimbres tradicionales y propios de la sociedad industrial y de los estados nacionales). Parece que nos quedan algunos años de hegemonía ideológica y política de la derecha como expresión del desequilibrio entre economía y mercados frente a sociedad y política. Pero ni el ritmo del cambio ni su orientación están determinados. Nunca lo han estado. Se trata de poner en marcha los procesos de cambio para que estas alternativas puedan llegar a ritmo digital y no a ritmos agrarios. Toledo, 10 de enero del 2013. 18