La microbiología es crucial en la formación de enfermería, ya que permite a los profesionales entender los agentes patógenos y aplicar medidas de prevención para garantizar la seguridad en la atención. Incluye el estudio de bacterias, virus, hongos y parásitos, así como la aplicación de cuidados prioritarios como la asepsia y vigilancia epidemiológica. Además, se enfoca en el manejo adecuado de muestras y la administración correcta de antibióticos para combatir la resistencia microbiana.