La arquitectura mexicana en el siglo XIX se vio influenciada por los nuevos estilos europeos, el cambio económico y las nuevas técnicas de construcción. Los estilos predominantes incluyeron el clasicismo, racionalismo, romanticismo y eclecticismo. Durante el Porfiriato hubo un auge de la construcción privada hasta 1905 cuando comenzó una crisis económica. La Revolución Mexicana dirigió la atención a espacios habitables para la nueva dinámica social de igualdad. Se adoptaron nuevos material
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