El aprendizaje basado en proyectos es un enfoque educativo que fomenta la colaboración entre estudiantes de diversos antecedentes para resolver problemas del mundo real, apoyado en principios constructivistas. Este modelo promueve habilidades interpersonales importantes, incrementa la motivación y facilita la integración de conocimientos prácticos, aunque su implementación requiere un diseño instruccional cuidadoso y presenta desafíos logísticos. En resumen, ayuda a los estudiantes a adquirir competencias clave, aunque conlleva costos y la necesidad de coordinación entre equipos.