El paciente presenta un cuadro de delirio, negación de su enfermedad y conductas agresivas debido a problemas de drogadicción, alcoholismo y trastornos mentales. Se proponen tratamientos que incluyen desintoxicación, rehabilitación cognitivo-conductual, terapia y reestructuración ambiental para abordar la esquizofrenia, trastorno del estado de ánimo y depresión del paciente.