El documento describe un programa de salud preventiva llamado "Quiero Vivir Sano" que se aplicó a dos pacientes. El programa buscaba crear conciencia sobre malos hábitos y reemplazarlos con buenos hábitos para lograr una vida saludable. Se describen los hábitos trabajados con cada paciente, incluyendo beber agua, mantener una actitud positiva, alimentarse bien, hacer ejercicio, descansar adecuadamente y practicar el autocontrol.