El protocolo tiene como finalidad orientar a docentes de educación inicial en la recolección de evidencias y observaciones del desarrollo y aprendizaje de niños de 0 a 5 años. Incluye un instrumento pedagógico que permite hacer un seguimiento formativo a través de fichas de registro organizadas por grupos de edad, cada una con competencias definidas en el currículo nacional. El proceso metodológico se centra en la observación activa y el análisis de datos para mejorar la práctica pedagógica y la comunicación con los padres.