El síndrome purpúrico se caracteriza por la presencia de sangrados subcutáneos como petequias o equímosis, que pueden aparecer de forma espontánea o tras un pequeño trauma. Esto suele deberse a anormalidades de las plaquetas o los vasos sanguíneos. El purpura trombocitopénico idiopático (PTI) es una causa frecuente en niños y se manifiesta con lesiones equimótico-petequiales, a menudo asociadas a sangrado de mucosas