La matriz de transacciones de clientes es un principio de marketing de visión a largo plazo que considera el valor de un cliente en base a la relación que mantiene con la compañía a lo largo del tiempo. Esta perspectiva implica reconocer que aunque un cliente pueda usar temporalmente los servicios o productos de otra compañía, puede volver a usar los de la propia compañía. Al enfocarse en el valor a largo plazo del cliente, las compañías suelen ofrecer un mejor servicio para fomentar la fidelidad del cliente.