El documento propone actividades para que niños identifiquen y expresen sus emociones. Se sugiere adaptar un espacio en casa y observar fotos familiares para dialogar sobre emociones. Luego, leer el cuento "La pena de Oso" y utilizar un "Emociómetro" para hablar sobre la tristeza. El objetivo es que los niños entiendan que todas las personas experimentan diferentes emociones.