La salud integral incluye la salud física, mental y social. Implica un estado de bienestar general y la ausencia de enfermedades. Mantener una salud integral requiere una dieta balanceada, ejercicio regular, buena higiene y un estilo de vida saludable. Factores como la genética, el ambiente y el acceso a la atención médica también influyen en la salud de una persona.