El documento explica la integración empresarial como un proceso que puede adoptar diferentes grados: máxima, mínima e intermedia, donde la tecnología y la gestión eficiente de la cadena de suministro son clave para mejorar la competitividad. Se destacan las ventajas de contar con sistemas de gestión de relaciones con proveedores (SCM), como lealtad del cliente, acceso a nuevos mercados y liderazgo de mercado. Además, se abordan los desafíos de estos sistemas en la adaptación a cambios imprevistos y la necesidad de agregar valor en cada eslabón de la cadena.