Este documento describe varias serpientes venenosas, incluyendo la taipan australiana cuyo veneno puede matar a un humano en minutos, el krait común asiático cuyo veneno es 15 veces más potente que el de una cobra, y la vibora de Rusell que probablemente causa más mordeduras graves en el mundo. También menciona la cobra filipina, la cobra real gigante y los efectos del veneno de serpiente en la sangre.