Las bases de datos permiten almacenar y organizar grandes cantidades de información de manera accesible y actualizada. Se usan en supermercados, escuelas, policía, servicios públicos y telecomunicaciones para registrar precios de productos, datos de estudiantes, antecedentes de personas, consumos e información de clientes. Gracias a las bases de datos, la información se puede buscar y manejar de forma más rápida y eficiente que revisando archivos físicos.