Las tablas hash permiten almacenar objetos mediante el uso del método hashcode para generar una clave, aunque esto puede dar lugar a colisiones si objetos distintos generan la misma clave, por lo que es necesario reimplementar el método equals. Las funciones de dispersión transforman cadenas en enteros para determinar la posición de inserción en la tabla hash, siendo la regla de Horner una solución óptima al asignar un peso a cada carácter.