Los muros de corte y el encamisado de concreto son métodos de reforzamiento estructural que aumentan la rigidez y resistencia a cargas horizontales. El reforzamiento con fibras de carbono mejora la resistencia a tensión de manera unidireccional siguiendo las fibras. Todos estos métodos requieren preparación de superficies, adhesivos epoxícos y consideraciones de diseño para lograr un comportamiento monolítico entre los elementos nuevos y existentes.