El documento clasifica las quejas de los clientes en cuatro tipos: quejas reales con solución, quejas reales sin solución, quejas ocultas o excusas, e infundadas. Explica que todas las quejas deben procesarse de la misma manera a través de siete pasos. También comenta que los clientes escuchan selectivamente la información y que un mismo mensaje puede interpretarse de diferentes maneras por diferentes personas.