Un currículo organizado por áreas de conocimiento permite que los estudiantes desarrollen mejor sus habilidades cognitivas. El currículo está dividido en subniveles desde primer año de educación general básica hasta el bachillerato general unificado. Cada área incluye objetivos, contenidos y criterios de evaluación. La implementación de este currículo requiere metodologías centradas en el estudiante y el trabajo en equipo para lograr los objetivos del perfil de salida.