El documento describe cómo la familia es el lugar ideal para desarrollar valores fundamentales como la alegría, generosidad, respeto, justicia, responsabilidad, lealtad, autoestima y amor. Estos valores se enseñan a través de la presencia física, mental y espiritual de los miembros de la familia y su disposición al diálogo y convivencia. La familia es esencial para forjar valores que luego se transmiten a la sociedad.