Este documento es una carta de un docente al gobernante en la que contrasta sus roles y responsabilidades. El docente señala que mientras el gobernante pasará a la historia, él quedará en la memoria de los estudiantes. Además, mientras el gobernante decreta leyes y dirige la justicia, el docente vive la escuela y enseña de manera justa. El docente también indica que mientras el gobernante recibe apoyo político, él recibe el cariño sincero de los estudiantes.