Waris Dirie, la primera modelo africana en firmar un contrato exclusivo con Revlon, narra su difícil infancia nómada en Somalia y su lucha contra la ablación femenina en sus libros y discursos. Tras escapar a Nueva York a los 13 años, se convirtió en embajadora de la ONU, abogando por la educación y los derechos de las mujeres en África. Ahora busca la paz y el respeto, habiendo llevado su mensaje de esperanza a millones, y ha creado la fundación Desert Dawn para combatir la violencia hacia las mujeres.