Las aplicaciones web 2.0 permiten una mayor interacción entre usuarios a través del desarrollo de redes sociales donde pueden expresarse, publicar contenidos y colaborar de forma descentralizada. Esto difiere de la web 1.0 que tenía un enfoque más informativo y pasivo para los usuarios. Las aplicaciones web 2.0 también facilitan el aprendizaje autónomo y trabajo en equipo entre estudiantes y profesores.