Ecuador propone la Iniciativa Yasuní, comprometiéndose a dejar bajo tierra el 20% de sus reservas de petróleo para evitar emisiones de CO2 y mitigar el calentamiento global, con un costo de inversión del 1% del PIB mundial. La iniciativa incluirá la emisión de Certificados de Garantía Yasuní (CGYs) como compensación por emisiones evitadas, y los fondos recaudados se destinarán a proyectos de desarrollo sostenible y conservación ambiental. Ecuador busca un cambio hacia un modelo económico sustentable, protegiendo su biodiversidad y promoviendo la equidad social.