Este documento discute cómo Facebook puede usarse como una herramienta educativa poderosa para apoyar el proceso de enseñanza y aprendizaje. Explica que los estudiantes del siglo XXI necesitan dominar la tecnología y desarrollar habilidades de comunicación, colaboración y aprendizaje. Luego, proporciona varias maneras en que los maestros pueden implementar Facebook en sus clases, como compartir contenido, realizar encuestas, crear grupos de estudiantes y mantener la comunicación con los padres.