La evaluación es un proceso fundamental en la educación superior que permite dar seguimiento a los aprendizajes de los estudiantes y mejorar los procesos de enseñanza. La evaluación debe ser integral, sistemática, flexible, participativa y permanente. Debe centrarse no solo en aspectos memorísticos sino también en el desarrollo de competencias, mediante metodologías activas y situaciones cercanas al mundo laboral. El docente debe utilizar la evaluación para proveer retroalimentación que permita a estudiantes y colectivo identificar fortalezas y oportun