La Web 2.0 permite la participación activa de los usuarios al darles voz propia y control sobre sus propios contenidos en la web. Esto aumenta el interés de los usuarios y permite que los contenidos sean alimentados por particulares, abriendo discusiones y compartiendo información. La Web 2.0 surgió en 2004 con nuevas aplicaciones que tenían principios como usar la web como plataforma, mover la información a través de efectos de red, y permitir innovación a través de desarrolladores independientes.