Felipe II fue el rey de España en la segunda mitad del siglo XVI bajo cuyo reinado España alcanzó su mayor poderío, anexionando Portugal y logrando importantes victorias militares como las batallas de San Quintín y Lepanto que frenaron la expansión francesa y otomana respectivamente, aunque su derrota en la Armada Invencible marcó el inicio del declive español frente a la creciente hegemonía inglesa.