El documento analiza el desafío del desarrollo local en un contexto de globalización, destacando cómo la interdependencia económica y las nuevas tecnologías influyen en las economías locales. Propone un enfoque de desarrollo local que invierte la tendencia de modelos ascendentes, enfatizando la importancia de la participación comunitaria y la creación de redes sociales. Además, se menciona la necesidad de un equilibrio entre el mercado y la intervención del estado para abordar crisis económicas y promover un crecimiento sostenible.