El documento discute el enfoque de competencias en la educación. Señala que el término proviene del campo de la lingüística y el mundo laboral. Su aplicación en la formación técnica ha tenido éxito pero su uso en la educación básica y superior ha traído nuevas dificultades. No existe aún una clasificación completa de competencias que guíe el diseño curricular. El enfoque es joven y se necesita más análisis para determinar su potencial para mejorar la práctica educativa.