La pre-revisión es el primer paso del proceso de inspección técnico-mecánica y de gases de un vehículo. Se realiza para determinar si el vehículo cumple con las condiciones mínimas para iniciar el proceso e incluye la verificación del tipo de vehículo y su identificación con documentos como la licencia de tránsito y el SOAT. El vehículo debe presentarse limpio y sin tapacubos para facilitar la inspección.