El documento habla sobre las artes marciales y la filosofía implícita en ellas. Explica que todas comparten la búsqueda de las mejores formas de enfrentar y resolver un conflicto de manera pacífica. Señala que el Limalama en particular enseña a conocerse a sí mismo, evaluar al adversario para potenciar las propias cualidades y usarlas en beneficio propio de manera segura. Finalmente, destaca que la constancia en el entrenamiento y un buen guía son claves para lograr la victoria.