Venus se enamora de Adonis, un bello joven, y pasan meses felices juntos. Venus le advierte a Adonis que evite cazar leones, pues estos odian a Venus. Un día, Adonis ignora la advertencia y persigue a un jabalí, el cual lo hiere de muerte. Al encontrarlo muerto, el dolor de Venus es tan grande que transforma su sangre en la flor efímera de la anémona.