El documento describe las bases de datos sanitarias informatizadas, que permiten realizar estudios farmacoepidemiológicos utilizando datos médicos preexistentes de grandes poblaciones. Explica que estas bases de datos ofrecen información más completa y fiable sobre exposiciones a medicamentos y resultados clínicos, lo que permite evaluar efectos adversos infrecuentes de manera rápida. Además, presenta ejemplos de importantes bases de datos sanitarias informatizadas en Estados Unidos, Reino Unido y España.