Recientemente, varios atentados terroristas en Londres y París evidencian la creciente amenaza del yihadismo, con atacantes radicalizados principalmente en entornos como las prisiones. Estos incidentes han resurgido el debate en Europa sobre la efectividad de las estrategias de prevención contra el terrorismo, mientras que las autoridades continúan enfrentando desafíos para desarticular grupos terroristas. Históricamente, los ataques en España han sido variados, con un énfasis en la desarticulación de células en operaciones como la 'operación dátil', que destapó la red de al-Qaeda en el país.