Este documento ofrece orientaciones para que los padres ayuden a sus hijos entre 6 y 12 años con los estudios. Sugiere valorar los estudios, proporcionar un espacio tranquilo para estudiar, elaborar un horario de estudio, supervisar el progreso, ayudar a organizarse, ofrecer ayuda directa limitada y mantener contacto con el colegio. El objetivo es colaborar sin sustituir a los hijos en las responsabilidades del estudio.