Para configurar un equipo de cómputo, es importante considerar dónde instalarlo y usar muebles especializados que faciliten el acceso a cada componente y liberen espacio en el escritorio. Un equipo de cómputo se compone de una unidad central de procesamiento, unidades de entrada y salida de datos, y unidades de almacenamiento secundario como el disco duro y lectora de CD, cada una con funciones específicas. También es necesario realizar una instalación eléctrica a tierra para evitar cortocircuitos.