El documento aborda la importancia de la contratación electrónica e informática, definiéndolas y destacando sus diferencias: la primera se realiza a través de medios electrónicos, mientras que la segunda se centra en bienes o servicios informáticos. Además, se discuten aspectos como los contratos de adhesión, cláusulas abusivas y vicios de consentimiento en la telecontratación, así como el concepto de outsourcing en la gestión de sistemas de información. Se enfatiza que la contratación electrónica puede implicar errores respecto a la identidad y contenido, y la posibilidad de fraude.