La etnografía va más allá de la antropología e historia al utilizar datos y fuentes del pasado de manera antropológica para entender la dimensión temporal. Requiere una interrelación permanente entre la antropología, la historia y las fuentes históricas para comprender las diversas situaciones de los pueblos a través del tiempo. El saber etnohistórico asume una consideración del tiempo y el espacio sobre la antropología para lograr la mayor comprensión de los fenómenos sociales.