El rey Felipe IV organizó una fiesta en el bosque para celebrar el cumpleaños de su hijo, el príncipe Baltasar Carlos. Sin embargo, durante la fiesta el príncipe desapareció. El rey emprendió una búsqueda para encontrar a su hijo, descubriendo que había sido secuestrado por su mejor amiga María de Austria. Tras engañar a María para que liberara al príncipe, el rey logró rescatar a su hijo sano y salvo.