El documento discute la extracción forzada de muestras biológicas de un acusado y si esto viola sus derechos constitucionales. Por un lado, obtener pruebas biológicas puede ayudar a descubrir la verdad, pero también puede afectar el derecho a la integridad física y la privacidad. Los peritos médicos solo deben extraer muestras con una orden judicial y usando métodos médicos seguros y éticos. No deben usar la fuerza física directa contra un acusado.