Este documento establece las facultades y atribuciones de los municipios mexicanos de acuerdo con el artículo 115 de la Constitución. Entre otros aspectos, limita el periodo de los gobernadores estatales a seis años sin reelección, establece requisitos mínimos para el número de diputados locales, garantiza la independencia del poder judicial estatal, y otorga a los estados la facultad de celebrar convenios con los municipios para la prestación de servicios públicos.