Las asociaciones y sociedades civiles difieren principalmente en sus aportaciones, objetivos y administración. En las asociaciones, las aportaciones no son obligatorias y su objetivo no es económico, mientras que en las sociedades los socios deben aportar bienes para formar un patrimonio y su fin es predominantemente económico. Las asociaciones son administradas por una asamblea general y un director, mientras que las sociedades tienen uno o más socios administradores.