La videoconferencia permite reuniones entre grupos de personas en lugares alejados a través de la transmisión bidireccional de audio y video en tiempo real. Se originó en los primeros sistemas de televisión y ha evolucionado gracias a la compresión digital de audio y video. La audioconferencia es más antigua y económica, facilitando la interacción entre individuos distantes a través de telefonía de alta calidad. Ambas tecnologías sirven para comunicarse de forma remota.