La niña amaba cantar y leer en voz alta, pero hablaba muy bajo. Un día descubrió que su voz se había ido porque no la usaba. La niña salió a buscar su voz preguntando a todos, pero no la encontraba. Finalmente gritó pidiendo que su voz regresara, y así fue. Entendió que para mantener su voz debía usarla y hablar con claridad.