El documento detalla un ataque cibernético que utiliza dispositivos del Internet de las Cosas (IoT) para propagar malware que altera la configuración de DNS en enrutadores domésticos, especialmente aquellos de la marca ZTE. Los atacantes emplean tácticas evasivas para permanecer fuera del radar mientras recopilan información personal a través de un keylogger incorporado. Se aconseja a los usuarios mantener actualizados sus dispositivos y firmware para minimizar riesgos de seguridad y privacidad.