El documento describe el enfoque educativo del Museo Thyssen-Bornemisza, destacando la creación de un laboratorio de desarrollo educativo que busca innovar y colaborar con la comunidad. Se enfatiza la importancia de la participación activa de los visitantes y la implementación de programas a largo plazo que integren nuevas experiencias y tecnologías. Se plantea también la necesidad de adaptar las experiencias educativas a las demandas cambiantes de la sociedad y a las necesidades de los jóvenes.