El documento analiza el impacto de la Expo Shanghai 2010, destacando su importancia como la primera en un país en vías de desarrollo y el enfoque hacia la sostenibilidad en la arquitectura y diseño de los pabellones. Se abordan aspectos climáticos y arquitectónicos de Shanghai, así como la adaptación de proyectos como el pabellón de Madrid a las condiciones locales. Se concluye que las exposiciones deben considerar la adaptabilidad al entorno para lograr un verdadero avance y no convertirse en una mera exhibición de diseños ineficientes.