El documento propone el uso del código QR como una herramienta para reducir la brecha entre los saberes populares y escolares al incorporar nuevas formas de expresión en el aprendizaje. Destaca la resistencia de los docentes a adoptar nuevas tecnologías y sugiere utilizar plataformas y aplicaciones digitales para promover el deseo de aprender. Se detalla un procedimiento para implementar el código QR en actividades académicas, permitiendo a los alumnos acceder a consignas y material de lectura desde sus dispositivos móviles.