El monasterio de Uclés fue originalmente una fortaleza musulmana del siglo X, que pasó a manos de la Orden de Santiago tras la reconquista. A lo largo de los siglos XVI-XVIII se remodeló y amplió en estilos renacentista y barroco, destacando la portada principal barroca y la iglesia de estilo herreriano. En la actualidad alberga un seminario menor.