Licurgo demostró el poder de la educación mediante la liberación de dos parejas de liebres y perros. Mientras que uno de los perros mató a su liebre, el otro jugó pacíficamente con la suya, mostrando que la educación puede transformar la naturaleza. Licurgo explicó que a pesar de haber nacido en las mismas condiciones, la educación diferente es lo que cambia a los seres. La educación, basada en una concepción de la vida que enseña a ser mejores personas, puede transformar positivamente al